La escuelita feliz
El basurero de Cobán. Montañas de desperdicios e inmundicia. Aquí residen los olvidados.
Aquí residen los olvidados. Niños y mayores corren velozmente al oír el rugir de los camiones para encaramarse a los mismos y conseguir cuantas más latas y botes mejor. A cambio obtendrán unos míseros pero imprescindibles quetzales para sobrevivir un día más.
Familias y familias viven sin luz, sin agua, sin más alimento que el que encuentran entre los buitres, las moscas y los perros que deambulan, entre la cochambre y la suciedad, cual fantasmas sin alma. Hará hoy unos cuatro años que construimos un pequeño barracón con dos objetivos fundamentales; impartir clases de alfabetización a los niños del basurero y contribuir a su escasa alimentación con un desayuno consistente. El responsable del proyecto en el basurero acudía un par de horas de tres a cuatro veces por semana.
En el verano del presente año 2008 hemos inaugurado “La Escuelita Feliz”. Ahora el proyecto dispone de un maestro diario a tiempo completo que se encarga de llevar a cabo actividades educativas y recreativas para niños desde 2 a 16 años aproximadamente. Por otro lado contamos con el apoyo de dos jóvenes de una comunidad religiosa indígena cuya función es la educación en lo que a higiene se refiere.